¿Qué es el arteterapia? / Sin categoría / Por CEIAC El Arteterapia como disciplina terapéutica de mediación artística, aborda al sujeto como ser global, quien a través de sus producciones tiende a la representación de sus conflictos y de su historia propiciando un proceso de transformación activa. Esta disciplina, convoca a la mediación de los lenguajes artísticos y los transforma en una vía de conocimiento y de desarrollo personal del sujeto. Propone una reflexión permanente acerca del sentido de cada uno de los lenguajes artísticos en los procesos de identidad sociocultural (Sánchez, 2013) El Arteterapia tiene como camino la facilitación de espacios y actividades de autoconocimiento y empoderamiento personal y colectivo mediante el proceso de creación y la expresión artística donde confluyen modos de hacer, sentir y pensar. Dichos procesos creativos promueven la resolución de conflictos y la toma de conciencia para el desarrollo de nuevas habilidades sociales y comunicativas en la búsqueda de alternativas de transformación personal y social. La Asociación Andaluza de Arteterapia, afirma que esta disciplina promueve el bienestar bio psico social para el desarrollo personal y social. Asimismo, convoca a las personas a la reflexión acerca de los condicionamientos en la búsqueda de estrategias para la transformación de la realidad. El arteterapeuta en su intervención produce una triple relación entre la persona, el arteterapeuta y el proceso de creación-obra, por lo cual el profesional debe estar preparado para discernir el abordaje de las categorías mencionadas de la forma más adecuada en base a las necesidades del sujeto. Ello implica contar con un marco teórico de referencia desde el cual podrá decidir buenas estrategias de trabajo (Domínguez, 2014) El marco teórico es integrativo; el Arteterapia se nutre de las propias construcciones teóricas y de los aportes de otros campos disciplinares que informan de manera sistemática acerca de diversos aspectos de los colectivos de intervención. Es posible mencionar los aportes de las teorías del Arte y de las teorías de la Psicología, sea analítica, humanística, sistémica y de dinámica de los grupos, como también de aquellos saberes que provienen de la Pedagogía, de la Anatomía y de la Metodología de Investigación. Desde el Arteterapia es posible gestionar y diseñar procesos de investigación para consolidar avances, distribuir el conocimiento y mejorar las prácticas desarrolladas. De manera que el profesional arteterapeuta contempla la necesidad ética de una interrogación permanente acerca de su práctica. Una necesidad de potenciar las investigaciones y publicaciones, ambas generadoras de confianza, de reconocimiento social y de redes de conocimientos que contribuyen a la divulgación de aquellos relacionados con la disciplina. La propuesta formativa debe contribuir al desarrollo del método científico y de procesos críticos de pensamiento. De modo que el profesional arteterapeuta, podrá cuestionar sus procesos de prácticas, desarrollar procesos analíticos y críticos con rigor científico, con compromiso ético para la mejora de la actividad profesional (Curría & Vallès, 2012) El desafío para la formación a distancia de técnicos superiores en arteterapia requiere de instituciones educativas con capacidad de crear estrategias para la implementación de recursos alternativos que tendrán como eje a las nuevas tecnologías y su relación con la información de modo tal que se puedan construir procesos de aprendizaje con sentido, basados en la comprensión y en el análisis crítico de dicha información La concepción de la sociedad del conocimiento actual es compleja e integradora, los sujetos se enfrentan a diversos sistemas de aprendizaje producto de la cultura y de las necesidades del contexto, dando lugar a permanentes procesos de adecuación respecto a las diversas comunidades de aprendizaje a las que pertenecen. Esta diversidad tiene como rasgo la propuesta de aprender a aprender, característica que define a la sociedad del conocimiento en respuesta a la necesidad de educarse toda la vida. Las estrategias de enseñanza en una propuesta formativa a distancia y desde una perspectiva constructivista dan lugar a instancias de producción de conocimiento y a diversas formas de distribución del mismo, entendiendo la centralidad que adquiere el acceso al conocimiento en la conformación de la estructura social. El encuentro entre las relaciones sociales y la tecnología tiene un carácter dinámico pues no se determina según aporta la concepción tecnocrática por el supuesto de que las tecnologías producen cambios en las relaciones sociales, sino que es posible entender en ese encuentro que las tecnologías responden a los requerimientos de las relaciones sociales en contexto, con un rol activo de los sujetos, con acuerdos que se actualizan de manera permanente y en interrelación.